Con la facilidad que ofrece internet para la creación de un medio digital y para muchos adaptarse a este modelo, han surgido en la República Dominicana y en el mundo entero, cientos de miles de opciones de medios digitales, unos que tratan los aspectos generales de las informaciones y otros enfocados en nichos, ya sea deporte, entretenimiento, economía y así sucesivamente, pero pocas de las personas que se encuentran al frente de un medio, conocen realmente como es el entramado de la publicidad online, quiénes están detrás, y la mayoría de estos, entienden que como se conectan a la plataforma de Google, se trata única y exclusivamente de este jugador el que se beneficia o está directamente o indirectamente ligado a este tema.
Cuando se tiene un medio digital que cuenta con un alto tráfico y que cuenta con la visibilidad en la industria, de inmediato comienzan a recibir un sinnúmero de ofertas de monetización, donde te exponen que se encargarán de monetizar tu medio y de lograr la mayor rentabilidad que jamás hayas imaginado, sin embargo, dejarse atraer por esto, solamente te llevará a limitarte y posiblemente entregarle tu inventario a empresas que no buscan que tengas el mayor rendimiento como prometen, sino que simplemente se están enfocando en obtener el máximo beneficio posible de dicho inventario.
La falsa promesa de rentabilidad
En el mundo de la publicidad online como en la mayoría de los negocios, existen los llamados revendedores, y sucede que en este tema, la cadena es bastante larga y ante cada uno de los eslabones, se queda un porcentaje de ganancia, entonces, cuando viene a llegar a ti, simplemente te llega el porcentaje más bajo, siendo tu el propietario del inventario y toda la cadena que te antecede, tan solo son intermediarios de un negocio bastante lucrativo, pero que lamentablemente los propietarios de medios, nunca se prepararon y sencillamente se han ido acostumbrando a las diferentes modalidades que múltiples empresas les presentan, pero no se han dedicado a investigar y conocer a profundidad como se desarrolla y funciona el negocio de la publicidad online.
Esto es como por ejemplo esos agricultores que se pasan meses cosechando y atendiendo sus productos, pero al final de la jornada, terminando vendido sus frutos a un intermediario que va a sus parcelas y recoge los frutos, los carga en camiones y los transporta a otra ciudad, donde los vende a un precio mucho mayor, cuando ha pagado un precio muy inferior a la persona que ha producido dichos frutos, sin embargo, ese agricultor, por diversas razones y circunstancias, no tiene los medios ni el conocimiento, y tal vez no cuenta con la pericia necesaria para tratar de vender sus productos de forma directa al consumidor.
En la publicidad sucede lo mismo, con el inconveniente de que la cadena es demasiado larga y lo que viene obteniendo el propietario del medio, es un precio irrisorio, que no le basta para lograr la tan ansiada y esperada rentabilidad que le prometieron y que las excusas para no lograrlo por parte de esas empresas, son diferentes problemas, adornados por palabras técnicas que buscan más que todo enredar la conversación y que no se pueda entender el funcionamiento de este negocio.
Conocimiento y dedicación al negocio de la publicidad
Lo más recomendable que puede hacer un medio digital para lograr acercarse a la meta de la rentabilidad indispensable para su sostenimiento y crecimiento paulatino, que lo lleve a ese sitial que tantas veces se le ha prometido, es contar con un personal interno o externo, que cuente con la experiencia y el conocimiento indispensable, que sepa como responder y atender única y exclusivamente aquellas solicitudes de empresas que tienen mayor transparencia en el modelo de comercialización y monetización, así preservar la calidad del inventario y que no se aprovechen del mismo y obtengan de su lado el mayor grado de rentabilidad, así como a poder determinar como acortar ese largo trayecto de intermediarios que existen, con el fin de lograr mejorar unos CPM (Costo Por Mil Impresiones) más acordes con el peso de dicho inventario digital.
